Hace un año, por iniciativa del interno Germán Mangold y con el apoyo de las autoridades de la Unidad Penitenciaria N° 2, entre ellos Psicólogo Fernando Demiryi, Alc Julio Monzón y Alc Mayor Walter Streu, se concretó el sueño de crear un espacio destinado a la realización de tatuajes.
El motivo fundamental fue abordar la temática de prevención de enfermedades que pudiesen transmitirse mediante sangre; es por ello, que cada uno de los internos que se tatúan deben previamente realizarse los análisis correspondientes: HIV, Hepatitis A y Hepatitis B.
Se desprenden de ese objetivo principal, otros dos: capacitar laboralmente a otros internos y terminar con la mitología de un tatuaje "tumbero", cambiándolo por "arte corporal", y así permitir una reinserción social más fácil.
El Taller es manejado exclusivamente por internos, Germán y Martín Ruggenini, y tiene el honor de ser el primer Taller de Tatuajes en Latinoamérica que funciona dentro de una institución penitenciaria.
Se debe destacar y agradecer también la colaboración de tatuadores externos: Martín Croce (capocha tattoo), Leonardo Moscovich (de Santa Fe Tattoo Studio) y Tomás Oliverti (Proveedor de insumos para tatuajes).
Desde las escuelas, no solo colaboramos con este taller, sino también los felicitamos y apoyamos desde un principio esta iniciativa e instamos a seguir trabajando de esta manera. FELICITACIONES!!!
